Melo Zed nuestro New Discovery
MELO-ZED se destaca por ser un músico conceptual excepcional, que se sirve de las constantes referencias a la música afroamericana, como el soul y el hip-hop, que aparecen recurrentemente en su productos musicales, en las que muestra sus principales influencias y su juego de sonidos; que tienen un papel determinante en su inspiración, para obtener resultados genuinos que, a su vez, van dejando una huella cuidadosa en cada una estas. Ello ha devenido en una tendencia de sonidos experimentales, en los que se puede registrar toda la carga sentimental del lo-fi, sin dejar la vanguardia de ciertos sonidos reciclados y reubicados, provenientes de entornos cotidianos.
Por otro lado, hay una tensión que se forma entre los gustos por los sonidos clásicos del jazz y el soul, respecto a los sonidos más urbanos y recientes, como el hip hop, el jazz hop y el cool jazz, que se hacen muy interesantes al momento de apreciar la composición de sus obras y la galería de sonidos de la cual se sirve: da la impresión de que en ningún momento se desprende de estas diferentes sensibilidades, lo que conforma otro aspecto destacable a su trabajo como músico: la inclusión de sonidos vivos a una composición sintéticamente diseñada para funcionar de una manera específica.
Todos estos elementos, desde la propia educación, hasta la melomanía de MELO-ZED, han derivado de forma maestra en su más reciente producción, Eleven, cuya obra deja entrever un evidente gusto por influenciar su propia música de una impresión cinematográfica que involucra lo afro y lo sintético, en el que los sonidos texturizados pintan sobre un lienzo de ruidos matemáticamente incorrectos, pero genuinos.
Lo cierto es que la propia composición del EP, permite apreciar el tracklist como una obra completa, aunque también deja espacio para que sea posible cambiar el foco de la apreciación y, una por una, escarbar entre los distintos tracks de esta obra debut con la que MELO-ZED ha comenzado a emprender.